En enero de este año di con el museo de los sonidos en peligro de extinción y ahora me encuentro con este otro museo de sonidos en peligro de extinción conservethesound.
De Estados Unidos o de Alemania, como es el caso de Daniel Chun y Jan Derksen se están encargando de rescatar todos esos sonidos del ayer.
“Lo visual domina nuestra vida. Los sonidos se quedan en un plano secundario. Nosotros queremos romper ese hábito”. “Normalmente las personas coleccionan pintura, fotografía, escultura y lo exhiben o lo llevan a un museo, pero raramente se preocupan de los sonidos”, lamentan.
“La vida de muchos objetos, especialmente en el mundo digital, es cada vez más corta. Cada vez más, vivimos en una sociedad de usar y tirar.”
Un museo que retrata la sociedad de consumo en la que estamos cada vez más inmersos en el que no hace falta irse muy atrás en el tiempo para encontrarnos con sonidos que no volverán.